Rapunzel es una chica especial, no por ser una princesa, si no por su pelo que, además de ser increíblemente largo, tiene el poder de curar las heridas y de mantener joven a las personas. Rapunzel ha demostrado ser una gran persona, llena de bondad, a través de todas sus acciones a lo largo de la película, y repasándola hemos creado la guía para ser buena persona (siguiendo los pasos de nuestra princesa Disney)
#1 Haz cosas buenas sin esperar nada a cambio.
A todos nos encanta la reciprocidad, no nos vamos a engañar, es decir, hacer cosas buenas esperando que, esas buenas acciones, hagan que las personas también sean buenas con nosotros. Sin embargo, es un tema que va más allá, lo natural es no llevar la cuenta, sino que te salga de dentro el querer ser buena persona.
#2 Cuida de todas las criaturas.
Desde el pequeño camaleón, hasta el caballo, todos los animales, sin importar su aspecto y tamaño, merecen tu respeto y cuidados. Piensa en que todos los animales son igual de importantes y todos tienen su función.
#3 Piensa en como tus acciones afectan a los demás.
Cuando somos pequeños no somos tan conscientes de ellos, pero, cuando nos hacemos mayores somos conscientes de que nuestras acciones pueden afectar a los demás y no siempre para bien, por ello, debes meditar bien lo que haces, sobre todo, si hay una persona que va a pasarlo mal.
#4 El mundo te corresponderá por ser amable.
Al final, como diría Baloo, lo más vital te llegará y si eres amable con las personas, tarde o temprano, te recompensarán de alguna manera. Sólo hace falta tiempo, recuerda, ser amable es una carrera de fondo, no recogerás los frutos inmediatamente.
#5 Todos tienen un sueño en el que vale la pena creer.
Una de las escenas más bonitas de la película es cuando Rapunzel se da cuenta de que todos esos matones tienen sus sueños, que van desde querer enamorarse a ser un gran pianista. Al final, todas las personas tenemos un sueño, es un hecho, la cuestión es que tenemos que apoyar a las personas en sus sueños, por muy disparatados que sean.
#6 No juzgues a los demás por sus apariencias.
En relación con lo anterior. Las personas que Rapunzel encuentra en la taberna, no nos vamos a engañar, no entran por los ojos. De hecho, seríamos muchos los que nos daríamos la vuelta nada más verles, sin embargo, Rapunzel les da una oportunidad y descubrirá que son personas con un gran fondo. A mayores, esas personas le ayudarán cuando necesite su ayuda, algo totalmente inesperado cuando les vemos por primera vez en la película.
#7 A veces, sacrificar tu felicidad por los demás es una fortaleza, no una debilidad.
En ocasiones, no nos queda más remedio que renunciar a ciertas cosas por nuestros seres queridos, por ejemplo, por nuestra familia. Aunque con pinzas, porque todos nuestros sueños son igualmente importantes, a veces toca sacrificarse por un bien mayor.
#8 A veces la mejor manera de estar ahí para alguien consiste en estar.
Sí, a veces sólo basta con estar. Muchas veces, ni las personas que más nos quieren pueden ayudarnos, por ejemplo, a superar la perdida de un familiar. Sin embargo, en esa situación, al igual que en muchas otras, sólo basta con estar.
#9 Nunca dejes que tu estado de animo haga que trates mal a los demás.
Muchas veces no nos sale ser amables, sobre todo, cuando estamos atravesando una situación complicada, por ejemplo, cuando termina nuestra relación con nuestra pareja. Sin embargo, a pesar de que estes triste, no debes pagarlo con los demás, más que nada, porque no tienen ninguna culpa.