Transforma objetos cotidianos en monstruos

Cómo transformar cualquier objeto en un monstruo

El protagonista de este artículo es Stevecasino, un artista que lo ha petado en instagram compartiendo las fotos de sus singulares monstruos. Resulta que ha encontrado una forma muy particular de dar rienda suelta a su creatividad, combinando viejas latas de la cocina con su especial talento moldeando arcilla o plastilina.

En su trabajo podemos ver monstruos de lo más terrorífico saliendo de estos utensilios: una lata de champiñones, un bote de lata e incluso una cocacola; donde parece que la lata forme parte de la propia morfología del monstruo como podría ser el caparazón en una tortuga, o la concha de un cangrejo ermitaño. En este post vamos a compartir sus tres trabajos más espectaculares para que cojas ideas para el siguiente fin de semana de lluvia. Solo necesitarás arcilla, pintura, alguna lata vieja y una tonelada de creatividad

Seta monstruosa en lata de champiñones

Monstruos en objetos · por Stevecasino
Monstruos en objetos · por Stevecasino

Hay latas de conservas que no saben del todo bien, pero lo que nunca pensamos es que pudieran contener un monstruo acechando y deseando que alguien la abra para atacar. ¿Qué te parece este modelo?

Nata alien asesina

Monstruos en objetos · por Stevecasino
Monstruos en objetos · por Stevecasino

Si pensabas que la nata solo podría hacer daño a un intolerante a la lactosa, será porque nunca habías visto un bote mutante como el que nos plantea Stevecasino. Donde se aprecian unos dientes y lengua escalofriantes y ponzoñosos que podrían contagiarte cualquier enfermedad con un lametazo

Cocacola monstruosa

Monstruos en objetos · por Stevecasino
Monstruos en objetos · por Stevecasino

Terminamos con una lata de Cocacola que al igual de todo lo que os hemos enseñado no es ni mucho menos lo que parece, porque en sun interior hay un monstruo que es aterrador.

Los trabajos de Stevecasino nos han dejado con la boca abierta. La verdad es que nunca se nos había pasado por la cabeza el gran potencial que tienen los objetos cotidianos para hacer cosas como las que os hemos enseñado.

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